jueves, 26 de diciembre de 2013

"...cuanto tiempo esperando a que fueras mito"
Me encapriché de ti porque pensé que encajábamos , y ahora veo que para lo único que realmente servíamos era para herirnos. Supongo que fui yo la que pidió un futuro desesperadamente, así que con la misma boca con la que dejaba marcas de amor y pintalabios me deshago de tus cadenas.
No busco arreglarme ni que vengas siendo héroe, pero ahora no hay vuelta atrás; mi reloj ha dejado de acompasarse con tus latidos, tu pulso ya no marca mi tiempo. No quiero saber nada de tu caos , de los  remordimientos que circulan a tu alrededor y nunca llegan a tocarte. Ojalá yo hubiera sido ella, porque te juro que el precio de mis besos era mucho más barato si eras tú el postor. El miedo a lo desconocido me ha hecho no buscar a nadie más y conformarme con la mitad de un amor casi inexistente.
No me vuelvas a querer, o no lo vuelvas a intentar. Los dos sabemos que por mucho que te esfuerces es imposible vaciarme más, ya me has dejado seca de amor y sentimientos.
Ni mito, ni héroe,ni destino...
Desde luego ya no importa, no hay nada que me haga cambiar de opinión; te quiero lejos, casi tanto como te quise cerca aquel verano.

jueves, 12 de diciembre de 2013

Look for the girl with the broken smile, ask her if she wants to stay awhile ,and she will be loved 


Hay una yo que solo te pertenece a ti, 
y creo que va a ser así siempre,
 una mitad que has moldeado con tus manos imponiendo las fronteras de lo que solo tú puedes entender. Me da miedo reconocer que te hubiera dejado  imprimir esa barreras donde quisieras,
 te hubiera dejado explayarte y que solo tú fueras capaz de leerme, 
o de leer en mi. 
Luego está mi otra yo, 
la yo que quiere no necesitarte, 
la que se resiste a tenerte cerca. 
Adoro a esa persona en la que me convierto cuando me destrozas, 
la persona que surge después de  tus torturas. 
Parece que está entera, 
y sin duda es capaz de bailar bajo la lluvia sin necesidad de que la mires.

Un millón de minutos de silencio por esa pequeña parte de mi que se ha perdido cuando has vuelto a partirme por la mitad.
A este paso no van a quedar más que migajas de mis restos.
Lo importante es que has vuelto a romperme, 
hace mucho que eso solo lo haces tú, 
que solo tu boca puede morderme los complejos y enredaros con la legua. 
Vuelvo a tener miedo, 
estoy acojonada con lo que me provocas con solo tu voz en cualquier formato. 
¿Vas a volver a dolerme?
 ya no me puedes destrozarme sin recompensas, por favor. 
Todavía sigo pagando a plazos haberte querido esa ultima vez. 
Piénsalo, igual para ti nunca he sido yo, si es así déjame libre, 
no me encierres en ti para dejar que me marchite. 
Siempre tendrás un lugar a dentro mía donde puedes regresar, 
eso no puede arrebatártelo nadie. 
No tengas miedo, la yo que es solo tuya no se va a ir a ninguna parte, 
al menos de momento. 
No voy a dejarte caer por los precipicios, 
te agarraría aunque para ello tuviera que volver a romper los pedazos de mi que tu bombardeas con tus mentiras.
 Pero amor, me merezco ser feliz,
 me merezco un lunes por la mañana con margaritas y tostadas echas con arena de playa. 
Una puesta de sol aferrada a ese instante de infinidad. 
Un grito desesperado desde la montaña más alta del mundo mirándome para imprimirme en algún insomnio. Me merezco a alguien que me sostenga la mano y el corazón, 
decide de una vez si quieres ser tú.

viernes, 6 de diciembre de 2013

Hoy te he visto desnudo,
como quien ve una flor despojarse de sus pétalos,
y he sabido lo que era caminar por los bordes de los vagones de metro
pasar la mano por encima de una llama y retirarla al instante
montar en moto sin casco y con un millón de sueños en su lugar.
Hoy te has quitado la ropa y la armadura
has dejado de ser héroe inalcanzable y te has vuelto de carne y verdades
los ideales se han quedado en la esquina de aquella habitación
la que ha sido testigo de mis marcas de amor y tus imperfecciones
esa que ha visto nacer una estrella en pleno diciembre.
Te he visto tiritando enfrente mía y me he acojonado
por que los amaneceres no deberían temblar nunca
eso eres aunque a veces quieras negarlo y ser impostor
pero tú cariño, tú no eres noche por mucho que lo desees
estas lo primero en el orden natural de las cosas, al menos de las mías.
Imposible no fotografiarte en la retina y dejarte tiritando un poco más
pensando que esto es por mi,  por tu pautas y comas
que se me deshacen entre los dedos mientras te rozo los limites de la piel
me quedo con eso y tus labios fijando las fronteras de mis miedos
arañándome con pasión para dejarme tatuada con tu esencia.


Ojalá te dieras cuenta de que nadie jamás te ha mirado como yo te miré aquella primera vez, desnudándote y dejando desperfectos sin conocerte aún. Pero tú eres demasiado cobarde para admitir que tampoco vas a encontrar a nadie a quien tú seas capaz de desnudarle el amor solo con mirarla.